Es este uno de esos asuntos en los que no ganas nada opinando y, por el contrario, corres el riesgo de ganarte enemigos. Decía mi abuela que para poca salud, mejor morirse y eso es lo que, a mi juicio, pretenden algunos de los empresarios del Centro de Estepona con su presidente al frente.
Pretender en pleno Siglo XXI que la solución a la crisis del comercio del casco antiguo pasa por aumentar la zona azul para facilitar el aparcamiento demuestra varios cosas. Una, que se viaja poco. Otra, que lo poco que se viaja, no se aprovecha para empaparse de las soluciones que otros, no tan lejanos, han adoptado con notable éxito y, por fín, que lo que parece que se pretende no es facilitar el acceso de los compradores al casco urbano, sino dar vida a aquellos a los que, precisamente, había que alejar del centro de las ciudades.
No les voy a hablar de Europa, ciudades como Milán o Londres penalizan el acceso en vehículos particulares al centro de la ciudad. En España, Málaga,Oviedo, La Coruña, Bilbao y cualquier otra sociedad progresista han optado por la ciudad de las personas en lugar de la ciudad de los vehículos. Que hoy, en Estepona, nuestros comerciantes aboguen por aumentar las zonas de aparcamiento en zona azul, en lugar de por los aparcamientos subterráneos que permitan la peatonalización del casco en favor del verdadero centro comercial urbano, demuestra un desconocimiento y una falta de visión dignas de los albores del siglo pasado.
Claro que son los mismos que piden la paralización de las obras en las calles en lugar de la agilización de las mismas, se muestran contrarios al progreso, se adaptan a los intereses municipales porque los suyos dependen de ellos, en definitiva, carecen de independencia y de criterio para contribuir al ordenamiento del futuro de esta ciudad.
Pretenden facilitar el acceso de los clientes a las zonas del casco histórico. El sistema está implantado en la calle Terraza y en la zona del Ayuntamiento
Los comerciantes del casco histórico buscan fórmulas para captar clientes. La falta de aparcamiento es una de las variables que impulsa a los usuarios a acudir a los centros comerciales para realizar sus compras en lugar de desplazarse hasta el centro. Con este escenario, la Asociación de Empresarios de Estepona (AEE) volverá a solicitar al Consistorio que implante la zona azul de aparcamiento en las calles del casco histórico. En la actualidad, este sistema, que funciona en los alrededores del Ayuntamiento y en la calle Terraza, permite a los conductores estacionar durante una hora de forma gratuita, en el horario comercial de mañana.
El presidente de la AEE, Gabriel Rubio, argumentó que esta fórmula permitiría agilizar la rotación de vehículos en más vías del núcleo urbano. El Ayuntamiento tendrá que estudiar la propuesta del colectivo, que aseguró que no supondrá ningún coste para las arcas municipales. Hasta el momento, para facilitar las compras a los consumidores, la Asociación de Empresarios de Estepona permite a quienes se acercan a sus comercios estacionar gratis en los aparcamientos subterráneos de Zapallito, Paseo Marítimo y La Viña.
Bajan las ventas
La bajada de ventas en el comercio tradicional se ha acentuado durante el verano. El colectivo empresarial ha cifrado las pérdidas de negocio en casi un 50% respecto a periodos estivales de años anteriores. «El poder adquisitivo de los ciudadanos ha bajado y eso se nota en la compra de artículos que no son de primera necesidad», apuntó Rubio. Los datos de la última encuesta realizada por la Asociación de Empresarios entre más de una veintena de establecimientos comerciales y de hostelería son poco halagüeños. Más de la mitad de los encuestados cree que la campaña de verano ha ido regular este año; y sólo el 13% la considera buena.
Respecto al gasto medio de quienes han visitado el municipio en estos meses, el 69% de los comerciantes y el 89% de los hosteleros consideran que los turistas han gastado menos que en años anteriores. Con todo, los profesionales de estos sectores han percibido un descenso en el número de visitantes.
Para el presidente de los empresarios, la temporada de invierno no se presenta con buenas perspectivas de incrementar el negocio. «La ropa de invierno se suele quedar sin vender porque el invierno de temperatura suave que tenemos no anima a los clientes a comprar estas prendas», argumenta Rubio.
1 comentarios:
¿ Quién dijo que avanzar, evolucionar....modernizar fuera fácil?....Nunca lo ha sido....esto es más viejo que el mundo.
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