A FALTA DE LUCES



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Buenos son semáforos. Yo no se si ustedes conocen la justificación técnica de la proliferación de rotondas en nuestras ciudades. Según los que saben de la cosa, las rotondas, complementadas por las bandas sonoras, consiguen dar fluidez al tráfico a una velocidad media razonable que evita el peligro a los peatones y elimina las retenciones que provocaban la presencia de semáforos en el centro de nuestras ciudades. Claro que esto no es una ciencia exacta y ni todas las rotondas tienen los mismos accesos de entrada y salida, ni pueden dotarse del mismo diámetro porque no lo permite su ubicación, ni hay ciudades iguales, ni todas las avenidas contienen el mismo tipo de zonas comerciales o escolares, ni el tránsito de autobuses escolares es similar ni, incluso, dentro de la misma ciudad, hay dos calles siquiera similares. No les quiero contar cuando la ciudad esta al borde del mar y los accesos a las playas se encuentran en las principales vías de la misma. Es entonces cuando la imaginación debe ser mayor, el estudio más exhaustivo y las decisiones más meditadas. O sea, exactamente lo contrario de lo que ocurre en Estepona. Si no estaba la cosa lo suficientemente caliente con el asunto del carril-bici, la consiguiente eliminación de uno de los accesos de entrada y salida a las rotondas, la no aplicación de los acuerdos plenarios y el cabreo generalizado de todos y cada uno de los ciudadanos que nos vemos obligados a circular por la Avenida del Carmen, ahora llega la antología del disparate. Pues no van y se les ocurre eliminar los pasos de peatones para instalar semáforos. Si, lo que oyen, bueno, lo que leen. Si el objeto de las rotondas como señalábamos antes es, entre otros, eliminar los semáforos, en Estepona, así de especiales somos, vamos a tener carril único, rotondas y semáforos. O sea, atasco por cojones. O por ovarios, vaya usted a saber.
En materia económica la cosa está que trina. Por primera vez en la historia, de verdad, hay auténtico peligro de que los trabajadores no cobren las nóminas en los próximos meses. Créanme, no tengo la menor intención de alarmar a nadie. Por el contrario, la situación que atravesamos a nivel general con casi ocho mil demandantes de empleo en nuestra ciudad, hace que todos estemos especialmente sensibles, suframos sus consecuencias y luchemos por su solución, lejos de tomar esto como una baza política. Por eso no es entendible la pasividad con que se afronta desde el gobierno municipal. Y no me refiero a que no se pida dinero ni se viaje en busca de no se sabe qué maná que, además, es imposible que llegue dado que el problema afecta a todos y cada uno de los municipios de nuestra comunidad. Me refiero a la pasividad y la tranquilidad que aporta el desconocimiento y la falta de interés en afrontarlo desde el aprendizaje. Uno, que ya tiene una edad, recuerda con cariño aquellos años de Epi y Blas en Barrio Sésamo. ¿Recuerdan?: Dentro, fuera. Lleno, vacío. No es tan difícil. El presupuesto municipal es algo parecido. Un saco lleno de manzanas que se reparte en familia. Cuando se termina el saco, se acaba la comida. Y no paren, las manzanas no paren. O se vuelve a subir al árbol y se llena de nuevo o no hay para comer. Pues eso.
Para terminar, me cuentan, desde la Casa Consistorial se ha podido tocar a algún concejal para que modifique su voluntad y diga “Diego” donde dijo “digo”. O que, para vestir el muñeco sin que se note mucho, haga mutis por el foro con no se sabe muy bien todavía que disculpa - trabajo, familia- de manera que el voto de calidad del alcalde haga que quienes gobiernan recuperen sus sueldos anteriores y nosotros, el resto, los paganos, el recibo de la basura, el alcantarillado y el IBI más elevado de la provincia, por no mirar más allá.




A mi no me sorprendería. Antecedentes cercanos tenemos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

A mi tampoco querido Pepe...dada la clase politica que tenemos pues es perfectamente posible... nuestros representantes politicos, los legales, no legales, autorizados moralmente, desautorizados, transfugas, recien llegados, hombres y mujeres de partido, esteponer@s de pro..., seguro que alguno de ellos prefiere el sueldo a su dignidad como persona y representante publico...lo dicho Pepe el saco de manzanas esta podrido y hay que cambiar hasta el saco... lastima que un municipio con la proyeccion de Estepona tenga que verse asi, yo vine hace 20 años y te puedo asegurar que Estepona ha cambiado muy poco y lo que ha cambiado se esta destruyendo a pasos gigantescos...una pena...

Anónimo dijo...

POr partes. Totalmente de acuerdo en el asunto del carril-bici y el destrozo de la avenida. Me cuesta creer, aunque tu seguridad me hace dudar, de la inclusión de semaforos para torpedear aún más a quienes la usamos de cuando en cuando. Ni pensar mi mujer y tres niños cuando vayan a la playa del Cristo.
Qué decir del Titi, yo te he entendido a la primera, golpes y golpes de pecho, mi pueblo, mi pueblo y mi pueblo; pero a la hora de demostrarlo, se baja los pantalones una vez más.
¿Tendrá algo que esconder?