Resulta cuanto menos extravagante la lectura de la portavoz municipal del PSOE en Marbella, Susana Radío, en relación con el no-anuncio efectuado por Bendodo sobre la candidatura de José María García-Urbano para las elecciones de 2011 en Estepona. Y digo extravagante tomando como base la segunda acepción del diccionario de la Real Academia de la Lengua, todavía española, que lo define de la siguiente forma: Raro, extraño, desacostumbrado, excesivamente peculiar u original. Coincidirán conmigo, que somos vecinos de la misma ciudad en que este medio se publica, a diferencia de la señora Radío, con acento en la í, que acusar al PP de "haber dado fe de carecer de candidato ni proyecto político que ilusione a esteponeros y esteponeras", por una decisión consistente en elegir dentro del ámbito de las competencias que uno tiene, a quién considera mejor para defender su proyecto político y el de los ciudadanos a quienes representa, es tremendamente extravagante, por no ir dos pasos más allá. No debe olvidar la señora Radío que quién hoy representa, como alcalde de Estepona y presidente de la Gestora a su partido, lo hace bajo la imposición del dedo de las agrupaciones provincial y regional, con el mérito único de formar parte de un gobierno del que se cayeron todos sus antecesores en la lista como consecuencia de decisiones judiciales. Es decir que, a fecha de hoy, el señor Valadez, las únicas elecciones de las que puede presumir haber salido ganador son las de Delegado de curso en la Facultad de Periodismo, caso de haberse presentado, lo que, sinceramente, desconozco. Hay que tener valor y ganas de ejercer el recién nombrado cargo en la ejecutiva regional para lanzarse de cabeza a semejante charco. O, lo que me parece bastante más razonable, que el miedo ha empezado a cundir en las filas de enfrente por el simple hecho de que el PP ha empezado a enseñar la patita. Y no deben andar descaminados en la elección, caso de confirmarse, dado el estado de nervios que han provocado las palabras de Bendodo quién, por otra parte, no ha dicho nada que no conozcan los cientos de profesionales del derecho, la gestión diversa y el asesoramiento jurídico en relación a la capacidad profesional del notario esteponero. Cuyo problema, al parecer, es que no se encuentra arraigado entre la ciudadanía de nuestro pueblo. Pues mira que bien, Susana, mejor para ti. Así, la competencia será menor y tendréis la reelección asegurada. Pero me da a mí que por ahí no arde el puro. Que al PSOE, cuando hecha la mirada al terreno de juego y, en mayor medida, al banquillo, le ha empezado a entrar un run-run tripero que no terminan de ubicar. Pero yo se lo dejo claro sin necesidad de estudios médicos. Termina en el cuarto de baño y se manifiesta de la manera en que se ha manifestado.
Anda que no tienen asuntos de que tratar, por ejemplo el de su compañera de corporación y partido y presunta trabajadora del Ayuntamiento de Estepona o el de su marido, colocado también en posición de privilegio y con sueldo casi ministerial por el increíble mérito de haber sido comisario político del partido durante los últimos años y beneficiarse de un "error" jurídico de, todavía, no se sabe quién. Pero como es más cómodo y menos conflictivo políticamente mirar la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio, la señora Radío vuelve los ojos a Estepona, a la que, con toda probabilidad, vino por primera vez a la presentación de la nueva gestora democrática socialista de la que no forma parte ningún miembro del Equipo de Gobierno salvo el alcalde y cuyos componentes, alguno de ellos al menos, tenía un día de antigüedad cuando le dieron su cargo. Quédese pues, señora Radío, tranquila en sus aposentos marbelleros, ponga orden en las filas de su partido si le dejan, ocúpese de la persecución de funcionarios y resto de personal que no concuerdan con las ideas de su alcalde esteponero y deje que nos equivoquemos solos.
En definitiva que el señor notario debe estar pensando desde su retiro profesional aquello que dijo Alonso Quijano: "ladran, Sancho, luego cabalgamos”.
0 comentarios:
Publicar un comentario