No sé si les suena el título. Se trata de una gran película realizada hace cinco años por Steven Soderbergh y protagonizada por unos magníficos actores, Cate Blanchett y George Clooney, acompañados por el conocido intérprete de Spiderman, Tobey Maguire. Una cinta en blanco y negro sobre espionaje en la Alemania ocupada por el ejército ruso y bajo la tutela de Estados Unidos, en 1945. Una vuelta al cine negro y de calidad, un experimento en una época de apuesta por la tecnología más que por la vuelta a las esencias del arte de contar historias.
Y de contar historias se ha tratado la campaña del Partido Socialista en Estepona. En este caso la de un alemán del que desconozco absolutamente todo, entre otras cosas porque no tengo el gusto de conocerle. Un alemán que, al parecer, ha tenido la desgracia de hacer negocios en el pasado con el que hoy es candidato a la alcaldía de Estepona por el Partido Popular, José María García Urbano. El Partido Socialista ha tirado de Registro Mercantil y ha descubierto que el señor Notario se dedica a crear sociedades, impulsar su línea de negocio, pagar impuestos religiosamente y generar empleo. ¡Será cara dura el Urbano!
Y encima, aprovechando la generosidad y cultura de premio al esfuerzo, se ha tirado diez años como Subdirector General en el Ministerio de Justicia, y el conocido ultraderechista, ex ministro de Felipe González, Alberto Belloch, se permitió condecorarlo con la Cruz Distinguida de la Orden de San Raimundo de Peñafort. ¡No quepo en mí de indignación! manifestó el secretario provincial de los socialistas al enterarse. ¡Hay que acabar con los enchufados!
Así que, como una jauría de caniches enganchados a un hueso de ballena, se lanzaron a la busca y captura del candidato esteponero y bucearon y bucearon en los registros habidos y por haber hasta que dieron con la tecla: ¡Es un liberal! Un devoto del estudio, el esfuerzo y la disciplina, amante de las artes y la cultura, salido de una familia trabajadora de clase media que con mucho esfuerzo pudo pagarle los estudios y, encima, políglota.
!Intolerable! manifestó Conejo, a la sazón vicesecretario de Organización de la provincial socialista cuando le echó la vista encima al mísero currículo del atrevido Notario. Si, al menos, hubiera tenido la sensibilidad de pagarse la carrera mientras ocupaba un cargo público en algún Ayuntamiento o Diputación, como Valadez o yo mismo, pensaba el magnífico orador que ocupa el puesto de portavoz socialista en la provincia. Una ignominia en toda regla.
Total, que el señor alemán que tuvo la desgracia de conocer al señor García Urbano años atrás se ha visto inmerso en una campaña electoral que no es la suya, baqueteado por la interprovincial socialista y, en el colmo de la mala suerte, no va a llevarse ni una dirección de área de toda esta historia. Claro que todavía podía haber sido peor.
Ahí está el propio García Urbano al que le vienen solicitando la declaración de bienes desde que anunció su intención de presentarse a la alcaldía por el Partido Popular. Con lo fácil que lo tienen acudiendo a los registros establecidos a tal fín en lugar de adelantar una obligación inherente a la aceptación del cargo de concejal. Pero, claro, ellos de esos no saben. Y no es que confundan lo público con lo privado, no. Sólo han conocido lo público.
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