CITIUS, ALTIUS, FORTIUS


Artículo de opinión para Diario Sol


La que da título a este comentario es una antigua alocución latina que significa “más rápido, más alto, más fuerte”. Es emblema de los juegos olímpicos junto a los cinco aros entrelazados desde que fuera pronunciada, en la inauguración de los primeros juegos de la era moderna, por el Barón de Coubertin. Olvidemos por el momento al “más alto y el más fuerte” y quedémonos con “el más rápido”.
No podría ser otro que el Ayuntamiento de Estepona en la modificación del tipo impositivo del IBI al 0,70 % que fue aprobado por el último Pleno de la Corporación y ha sido publicado por el BOP en menos de una semana. Resulta más sorprendente esta rapidez si se tiene en cuenta que esta modificación era de todo punto innecesaria al estar aprobado este tramo impositivo desde el mes de Mayo de 2008 en un acuerdo tomado a instancias del entonces concejal de Hacienda, Francisco Zamorano.
Lo curioso de esta historia es que esta velocidad en la gestión no tiene continuidad. Porque toda la agilidad observada en esta ocasión se contrapone con la lentitud observada para publicar la bajada en las tasas de basura y alcantarillado que, como señala este digital en su edición de hoy, han tardado dos meses en publicarse desde el 18 de Septiembre en que se aprobó. En relación con este asunto me gustaría hacer una precisión. Se está creando una corriente de opinión en esta baraja de fechas que tiende a justificar lo que no es ineptitud sino mala fe. En contra de lo que se viene manifestando, hay tiempo más que sobrado para anular esta tasa. Me explico: Dado que la publicación en el BOP del acuerdo plenario se efectuó el pasado 11 de Noviembre, a pesar de que el edicto está fechado el 24 de Septiembre, el plazo de alegaciones de 30 días hábiles terminaría el día 18 de Diciembre. Dando por sentadas dos cosas: Una, que se presentarán alegaciones por el propio gobierno o aledaños para evitar la pérdida de recaudación y dos, que alguna de ellas se presentará en una oficina de correos para intentar dilatar al máximo los plazos, nos encontramos en el día 22 de Diciembre, con Nochebuena y Navidad por delante.
Puestos en esta situación tenemos todavía cuatro días hábiles para convocar el Pleno que levante las alegaciones, los comprendidos entre el 28 y el 31 de Diciembre. Ahora que las fechas están claras, sólo hay que reservar espacio en el BOP para uno de los anexos que todos los años se reservan previendo estas situaciones. Y voluntad política. Porque, una vez claro que no existe problema para eliminar las tasas desde el punto de vista de la formalidad administrativa, queda explicar al ciudadano si existe voluntad política para llevarlo a cabo y si la demora observada hasta ahora ha sido casual o provocada. A mi no me cabe la menor duda de cual es la respuesta.
Citius si, pero sólo de vez en cuando.