A septiembre




Las noticias que la pasada semana publicaba en primicia este medio, subida de impuestos y utilización de fondos de patrimonio de suelo para el pago de nóminas parece que han pasado desapercibidas tras la resaca del mundial y la feria. Suele ocurrir. Los ciudadanos necesitan, necesitamos, algo de alegría y entre lo uno y lo otro nos hemos dejado llevar por la euforia y hemos dejado de lado la crispación, lo cual, teniendo en cuenta los tiempos que corren, es un respiro para el espíritu y un bien para la salud. Salvo, claro está, los efectos de la resaca dominguera que, tras cincuenta años de espera, puedo asegurarles han durado una eternidad.
Más o menos una eternidad es también lo que le gustaría a Valadez que durara este silencio sepulcral sobre ambos asuntos. Pero lo tiene difícil. De una parte porque, antes o después, el dinero tomado a préstamo terminará por pasarle factura. El escudo de los trabajadores durará lo justo y, si les vale el símil, devolver el dinero tras haber atracado un banco no elimina el delito. Pues eso, que disponer de lo no disponible por pensar que en el "totum revolutum" nadie va a rascar es un error del que el tiempo terminará por sacarlo. El otro asunto, la brutal subida del IBI a base de eliminar la subvención tiene su tiempo de maduración. Justo el que tarden las domiciliaciones en llegar a los bancos o los vecinos vayan recibiendo en sus casas los avisos del Patronato de Recaudación. A partir de ese momento, sus oídos deberán acostumbrarse al sonido de la marabunta.
Este pasado jueves se celebró sesión plenaria. La razón de sacarlo de su fecha era obvia: evitar el apartado de ruegos y preguntas tras un pleno en el que había poca chicha y menos limoná. Lo de la chicha se resolvió con arte por parte de la oposición mediante el conocido truco del Pisuerga y Valladolid que consiste en hablar de lo que se quiere aprovechando cualquier punto del orden del día. En relación a la limoná también hubo sorpresa. Se les cayó el punto a los de siempre, los que en el turno de extrajudiciales siempre pillan cacho. Y es que lo de la pluralidad informativa está muy bien, pero cuando es plural. Y aquí todo lo trabajamos en singular. De esa forma todo queda en casa. Claro que alguien ha debido pensar que una cosa es que te insulten a la mínima oportunidad y otra, encima, pagar por ello. Hasta aquí podíamos llegar y hasta aquí hemos llegado.
Y de aquí, como los malos estudiantes, hasta septiembre. En este caso por vacaciones. Me refiero a las oficiales. Algunos las otras se las tomaron hace un par de años y tienen la intención de hacerlas durar. En ese mes de repetidores se darán cita los candidatos en una carrera de fondo que habrá de durar casi seis meses. Algunos quedarán en el camino exhaustos por falta de alimento, otros serán víctimas de la pájara - estamos en pleno Tour de Francia - y los menos resistirán. Tengo para mí que esto va a ser una lucha sin cuartel y cosa de dos. Aunque, pasados ya diez días desde la fecha teórica de proclamación, en el seno de los socialistas las cosas no parecen estar tan claras. Si las cifras que circulan por los foros y redes sociales son ciertas, que lo son, la recogida de firmas de los contrarios a Valadez está siendo todo un éxito y un problema añadido a la desastrosa gestión que ha llevado del municipio y del partido. Más de trescientos militantes y simpatizantes suscribiendo con su nombre y DNI un manifiesto en contra de su proclamación como candidato, unido a la batalla que se está librando en Málaga contra la elección digital de su candidata a la alcaldía y en algún que otro municipio por la celebración de primarias, generan serias dudas en cuanto al futuro de la agrupación esteponera. Yo, que quieren que les diga, aunque se enfaden conmigo un par de vecinos de columna, estoy loco por que lo confirmen. Más que nada porque ya nos conocemos y le hemos cogido el gusto a la cosa. Yo hago lo de siempre y él lo contrario de lo que ha venido predicando. Suele ocurrir, cuanto más alto escupen, más dura es la lluvia que ha de caer. 
Y no es nada comparado con las nubes que están formándose en el horizonte.