En la línea de flotación: PSOE, SA




Les hablaba la semana pasada de cuchillos largos en el próximo congreso de los socialistas y anda que me han dejado mal. El artículo del diario oficial de la candidatura de Rubalcaba, El País, le ha lanzado un misil a la linea de flotación de la aspirante Chacón. Atacando donde más duele, en el concepto empresarial del entorno de la ex ministra, el diario de Prisa ha vuelto a poner de manifiesto donde están sus lealtades y, por ende, su independencia. No seré yo sospechoso de simpatizar con uno u otro pero, visto desde la distancia, me molesta el juego sucio de los que siempre presumen de limpios. Son los que utilizan la palabra emprendedores porque les molesta hablar de empresarios, los que hablan de memoria histórica pero la limitan a uno de los bandos, los que entierran en vida a un imputado pendiente de juicio pero sacan de gira mitinera a condenados en firme. Son, en definitiva, los depositarios de una supuesta superioridad moral en la que ya solo creen ellos y quienes les apoyan esperando una vuelta al pasado.
El País, punta de lanza del rubalcabismo, destacaba ayer que “Rubalcaba se presenta para evitar que el partido caiga en manos de un conglomerado de intereses variados que son los que han hecho perder músculo al partido”, en una clara acusación al entramado mediático que rodea al marido de la ex ministra, Miguel Barroso, y a sus socios empresariales ligados a medios de comunicación. Rubalcaba olvida de forma deliberada que el partido ya está imbuido en ese conglomerado y lo está con él de vicepresidente y superministro de cómplice. Habría mucho que añadir pero, intuyo, tales comportamientos esconden datos muy poco favorables para su candidatura y que el desarrollo del congreso puede dar una sorpresa al supuesto ganador.